¡Saludos a todos!
Este lunes 21 a las 20:00 y 22:00, dentro del ciclo en VOSE de Cinesa El Foro que organiza el CineClub Forum, se proyecta por vez primera en Extremadura una de las películas más sorprendentes, originales y polémicas del pasado año, HOLY MOTORS. Como siempre, os pedimos que ayudéis a difundir la información de la película llevando a vuestros amigos al cine o simplemente compartiendo este mail entre aquellos de vuestros contactos a los que pudiera interesarles. Recordad que parte de los 4,00€ que vale la entrada revierte en el Cineclub Forum por lo que simplemente el venir al Cinesa a disfrutar de una excelente película en VO sirve para ayudar a nuestras actividades y al Festival de Cine Inédito de Mérida. ¡Gracias de antemano y nos vemos en el cine!
HOLY MOTORS (Leos Carax, Francia-Alemania, 2012)
El señor Oscar es una persona que viaja de vida en vida: pasa de ser un gran ejecutivo a un asesino, después un mendigo, una criatura monstruosa, un padre de familia… El señor Oscar parece interpretar varios papeles, sumergiéndose completamente en cada uno de ellos. Está solo, únicamente acompañado por Céline, una señora mayor y rubia que conduce la limusina que le lleva a París y sus alrededores. Como un asesino concienzudo que va de sueldo en sueldo. En búsqueda del motor de la acción. Pero, ¿dónde está su casa, su familia, su paz?
Premios: Premio de la Juventud (Festival de Cannes 2012), Mejor Película, Mejor Director, y premio de la Critica (Festival de Sitges 2012) Mejor Película Internacional, Mejor Actor, Mejor Fotografía (Festival de Chicago 2012), Mejor Película Extranjera 2012 según los 41 Críticos convocados por la revista Fotogramas.
Presten atención al comienzo del filme: un hombre – es el propio director, Leos Carax – en una secuencia casi onírica, abre una pared y penetra en una sala de cine, grande y llena, en la oscuridad de la proyección. Los espectadores (¿nosotros?) delante de la pantalla, parecen petrificados. ¿Sueñan, están dormidos? ¿deslumbrados? ¿aburridos? ¿muertos? No lo sabemos. Empezamos a hacernos preguntas y antes de que tengamos respuestas, seguimos la pista a un hombre con traje que abandona su lujosa mansión y se despide de su familia para meterse en una limusina.
Antes de que nos preguntemos por su relación con el prólogo, casi sin darnos cuenta, ese personaje empieza un viaje de transformismo que nos hace testigos de varias vidas diferentes. Con cada uno de los giros de la película, ésta nos embarca en un género diferente. El hilo argumental parece inexistente ¿estamos ante una simple acumulación de sketches? ¿tiene alguna lógica lineal lo que estamos viendo? Las preguntas se acumulan y en nuestra mente, mientras las imágenes se van sucediendo de forma hipnótica, a ratos molestas, a ratos deslumbrantes… ¿estamos ante una nueva forma de cine experimental, ante una provocación en toda regla, una obra maestra, una tomadura de pelo?
Holy Motors puede ser todo eso y más cosas, pero por encima de todo es algo inusual en el cine de hoy en día: una película auténticamente libre, un ejercicio brutal de libertad creativa en la que su autor parece ajustar cuentas con su propio pasado – parte de las claves se esconden en su filmografía – y hasta con la historia del cine reciente sin que parezca preocuparle lo más mínimo lo desvalido que pueda sentirse el espectador o la polémica que va dejando a su devastador paso mientras la historia avanza en medio de un carrusel desconcertante de hallazgos, fogonazos geniales, agujeros e imperfecciones.
Holy Motors puede odiarse o amarse por igual y hasta de forma consecutiva, pero tiene la virtud de no dejar a nadie indiferente. Abrirá puertas distintas a la interpretación en cada uno de los espectadores y animará encendidos debates. Se sorprenderán pensando en ella mucho tiempo después de que las luces se enciendan. Por encima de todo, Holy Motors es toda una experiencia única, una obra que reflexiona sobre el poder de representación del cine y su capacidad de reinventarse, el trabajo del actor, el papel activo del espectador… Quizás todo se reduzca a eso que dice el gran Denis Lavant: la belleza del gesto (David Garrido, programador del ciclo)
Van un ciego, un paralítico y un enfermo con parálisis cerebral de viaje por España. No, no es un chiste. Tampoco un drama, aunque pueda parecerlo: es HASTA LA VISTA, una deliciosa película sobre la amistad, la discapacidad y el sexo que podremos ver el próximo lunes 28 en Cinesa el Foro dentro del ciclo en VOSE ¡No te pierdas una de las joyas escondidas del 2012, ganadora de la Seminci!
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