Dos de las películas presentes en el III Festival de Cine Inédito de Mérida fueron galardonadas el pasado sábado en Copenhague con sendos Premios de la Academia del Cine Europeo: Il Divo consiguió el premio al Mejor Actor del año para Tony Servillo por su impresionante caracterización de Giulio Andreotti - aunque su nominación era compartida por su participación en Gomorra, donde tiene un papel no protagonista, no duden que el trabajo que le ha valido el premio es el de la película de Paolo Sorrentino - mientras que Vals con Bashir consiguió el Premio a la Mejor BSO del año para su compositor Max Richter, al que vemos recoger el galardón. Toda una sorpresa ya que el principal favorito era Dario Marianelli por Expiación, pero en ningún caso injusto: es una maravillosa BSO.
Los pronósticos se cumplieron y la favorita Gomorra fue la gran triunfadora en la gala de los Premios de la Academia del Cine Europeo, consiguiendo un pleno al convertir en realidad sus cinco nominaciones (Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión, Mejor Actor y Mejor Fotografía) y dejando sin apenas opciones al resto de nominadas de este año, entre las que se encontraba El Orfanato de Juan Antonio Bayona, que se volvió de vacío al no conseguir ninguna de sus cuatro nominaciones. Lo mismo le sucedió a otra película que estará en Mérida, La Clase, ganadora de la Palma de Oro en Cannes y nominada a Mejor Película y Mejor Director, que fue victima asimismo del éxito de Gomorra.
En el apartado de interpretación Kristin Scott Thomas, por el filme francés Hace Mucho que Te Quiero, se impuso como Mejor Actriz a Hiam Abbass, protagonista de Los Limoneros, película que también podremos ver en Mérida dentro de la Sección Cine Comprometido, mientras que el galardón a Tony Servillo supuso asimismo que no consiguiera el premio Elmar Wepper, el estupendo protagonista de otra de nuestras películas de la Sección Oficial, Cerezos en Flor.
Otros galardones de la noche fueron el Premio al Descubrimiento del Año al irlandés Steve Mc Queen por su tremenda Hunger; el Premio de Excelencia a Magdalena Briedrzycka por su diseño de vestuario en la película polaca Katyn de Andrej Wajda, el premio FIPRESCI de la Crítica a Abdellatif Kechiche por La Graine et La Mullet y los homenajes especiales a la gran dama del cine británico Judi Dench y a los creadores del movimiento Dogma’95. Ah, el premio del público por votación popular fue para Harry Potter y la Orden del Fénix, algo que quizás debería hacer que la Academia reconsiderara seriamente las bases de este premio.
Como anécdota, reseñar que el momento más surrealista y torpe de la noche se vivió cuando una de las presentadoras de la gala dio por ganador a Óscar Faura, nominado al Premio a la Mejor Fotografía por El orfanato. El propio Faura se levantó de la mesa para, segundos después y ante el estupor de todos, tener que volver a sentarse cuando desde el escenario le advirtieron del terrible error ya que el premio era para Marco Onorato por Gomorra. Y es que los daneses hicieron cosas raras en su ceremonia, como este intento de comunicación entre Hollywood y Europa. Para los que no se manejen en inglés, el presentador cuenta cómo intentó que sus padres divorciados se reconciliaran marcando los números de ambos y colocando en posición inversa los teléfonos para que cada uno pensara que había sido el otro el que le había llamado. Intenta el mismo truco con la Academia de Hollywood y la Academia del Cine Europeo, a ver si así consigue que se entiendan:
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